París

Paris, je t´adore!
Esta lista la escribo con muchísima emoción y con un antojo inmenso de volver!
Comencemos con estos restaurantes súper clásicos. Aquellos que representan a la perfección la gastronomía francesa.
-
Brasserie Lipp: Abierto desde 1880. Este lugar es una belleza por dentro, pero nosotros preferimos sentarnos en las mesas que dan hacia la calle. Ver a los parisinos pasar es algo de lo que Ale y yo nunca nos cansaremos. En nuestra opinión, acá se come el mejor tartare de carne de la ciudad. Para empezar pedimos dos copas de vino rosado y compartimos de entrada las huevas de salmón con blinis. De segundo, el tartare avec des frites (con papas fritas) acompañado de un par de copas de Brouilly, un vino ligero y de notas frutales que nos gusta mucho. También acá se consigue un vino muy especial: Bouzy Rouge, Georges Vesselle. Es un tinto ligeramente gaseoso, delicioso. Para el postre vale la pena cruzar la calle e ir a Café Di Fiore, otro clásico de la ciudad. Allá la tarte tatín es de muerte lenta y el macaron de frambuesas y lychees es inolvidable.
Dirección: 151 Boulevard Saint-Germain
-
Chez George: Desde 1964. Otro clásico. Acá el ambiente es tan bueno como la comida. El lugar es pequeño y ruidoso.